La metodología de Farmacia Echavarri para conseguir un tratamiento efectivo en nuestros clientes frente a sus patologías se basa en la nutrición. Entendemos que para para retrasar la aparición o reducir los efectos de patologías como la ansiedad, la depresión o el TDAH, los suplementos alimenticios de nuestra farmacia se presentan como una alternativa eficiente.
El cuerpo humano es un sistema complejo e interconectado, y la salud de una parte puede tener efectos de largo alcance en otras áreas. El sistema nervioso, en particular, desempeña un papel crucial en la regulación de las funciones corporales y en asegurar que podamos movernos, pensar y sentir adecuadamente.
Sin embargo, este sistema puede ser afectado negativamente por diversos factores, incluyendo una mala alimentación, toxinas ambientales y elecciones de estilo de vida.
Eliminar alimentos dañinos para el cerebro
Una de las formas más fáciles y efectivas de mejorar la salud del sistema nervioso es eliminando compuestos dañinos de la dieta.
Al remover estas toxinas, puedes reducir la inflamación, mejorar la absorción de nutrientes y apoyar los procesos de curación natural del cuerpo.
De esta manera, eliminar lo que daña tu cerebro es un primer paso esencial para alcanzar una salud y bienestar óptimos. Alguno de estos alimentos negativos son
Ácido fítico:
El ácido fítico es un compuesto que se encuentra naturalmente en muchos alimentos de origen vegetal, como cereales, nueces y legumbres. A menudo se le llama "anti-nutriente" porque puede unirse a minerales, como el calcio, hierro y zinc, impidiendo su absorción por el cuerpo.
Esto puede llevar a deficiencias minerales y afectar negativamente la salud del sistema nervioso. Algunos alimentos ricos en ácido fítico incluyen cereales como trigo, maíz y arroz, así como nueces y legumbres como cacahuetes, almendras y frijoles.
Ácido oxálico:
El ácido oxálico es otro compuesto que se encuentra naturalmente en muchos alimentos de origen vegetal, como espinacas, col rizada y ruibarbo. Al igual que el ácido fítico, el ácido oxálico puede unirse a minerales, como el calcio, y evitar su absorción por el cuerpo. Esto puede llevar a deficiencias minerales y afectar negativamente la salud del sistema nervioso.
Aceites omega-6:
Los ácidos grasos omega-6 son un tipo de grasa poliinsaturada esencial para el cuerpo. Sin embargo, el consumo excesivo de ácidos grasos omega-6 en comparación con los ácidos grasos omega-3 se ha relacionado con la inflamación y afecta negativamente la salud del sistema nervioso.
Algunos alimentos ricos en ácidos grasos omega-6 incluyen aceites vegetales como el aceite de soja, aceite de maíz y aceite de cártamo, así como alimentos procesados y fritos.
Azúcares procesados:
Los azúcares procesados, como el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa y el azúcar refinada, se han relacionado con una variedad de efectos negativos para la salud, incluyendo la inflamación, el estrés oxidativo y enfermedades neurodegenerativas. Estos azúcares se encuentran comúnmente en alimentos procesados, como refrescos, dulces y productos horneados.
Alcohol:
El consumo excesivo y prolongado de alcohol puede tener efectos negativos en el cerebro y el sistema nervioso. Puede provocar daño neuronal, disminuir la función cognitiva, afectar el equilibrio químico del cerebro y aumentar el riesgo de desarrollar trastornos neurológicos. Eliminar o reducir el consumo de alcohol es esencial para proteger y promover la salud de tu sistema nervioso.
Tabaco:
El tabaco contiene numerosas sustancias químicas dañinas. Fumar tabaco se ha asociado con un mayor riesgo de enfermedades cerebrovasculares, deterioro cognitivo, enfermedad de Alzhéimer y otros trastornos neurológicos. Eliminar el consumo de tabaco es esencial para salvaguardar la salud y el funcionamiento óptimo de tu cerebro.
Alimentos para cuidar tu cerebro
La dieta influye en la salud física y mental de las personas. Una correcta alimentación puede generar importantes beneficios gracias a los nutrientes y antiinflamatorios que contienen. Los considerados alimentos esenciales deben consumirse a diario y son:
- Carnes de ternera, cordero y venado.
- Huevos de gallinas camperas
- Pescados pequeños obtenidos de fuentes sostenibles como salmón, sardinas y caballa.
- Verduras no almidonadas como espinacas, col rizada, brócoli, coliflor, espárragos y coles de Bruselas.
- Alimentos fermentados como kimchi, chucrut, kéfir y yogur.
- Grasas saludables como aceite de coco, mantequilla de pastoreo y ghee, aceite de oliva extra virgen y aceite de aguacate.
- Caldo de huesos
- Café y té orgánicos
- Aguacates, limones y limas.
Dietas saludables para el cerebro
Estos alimentos deben consumirse algunas veces a la semana para obtener una variedad de nutrientes y sabores. Algunos ejemplos de alimentos frecuentes son:
- Bayas como arándanos, frambuesas y fresas.
- Verduras crucíferas crudas o al vapor como brócoli, coliflor y coles de Bruselas.
- Verduras con almidón como camote, zanahorias y chirivías.
- Frutos secos y semillas como almendras, anacardos y semillas de calabaza (con moderación).
- Arroz blanco
- Chocolate negro con al menos un 85% de contenido de cacao (con moderación).
Existe otra variedad de alimentos que, en pequeñas cantidades y una frecuencia moderada, también son beneficiosos. No se debe abusar dado que contienen toxinas, azúcares o compuestos inflamatorios. Hablamos de
- Frutas con alto contenido de azúcar como plátanos, mangos y uvas.
- Verduras con almidón como patatas y maíz.
- Granos como arroz, quinua y avena (con moderación).
- Legumbres como frijoles y lentejas (con moderación).
- Verduras de la familia de las solanáceas como tomates, pimientos y berenjenas (si tienes sensibilidad)
Por último, desde Farmacia Echevarri desaconsejamos el consumo de algunos alimentos perjudiciales para la salud y el bienestar de nuestros clientes.
Los alimentos procesados y envasados como patatas fritas, galletas y crackers. Algunas bebidas azucaradas como refrescos, jugos y bebidas deportivas. Los aceites vegetales como aceite de canola, aceite de soja y aceite de maíz. Grasas trans como la margarina.
Habría que incluir en esta lista roja el pollo de granja industrial y los pescados con alto contenido de mercurio como el atún, el pez espada y el tiburón.
Siguiendo estas listas, nuestros clientes pueden asegurarse de consumir alimentos ricos en nutrientes y antiinflamatorios mientras minimizan su exposición a toxinas y compuestos inflamatorios.
Alimentos ricos en vitaminas y minerales
Algunos alimentos actuales no pueden proporcionarte todos los minerales y vitaminas que necesitas. La dieta moderna a menudo es rica en alimentos procesados y refinados, los cuales carecen de las vitaminas y minerales esenciales necesarios para un óptimo funcionamiento cerebral.
Además, la degradación del suelo, el uso de pesticidas y las prácticas agrícolas modernas han provocado una disminución de la densidad de nutrientes de nuestros alimentos. Esto significa que incluso si llevamos una dieta saludable y variada, es posible que no obtengamos todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 2 mil millones de personas en todo el mundo sufren de deficiencias de micronutrientes, causadas por la falta de vitaminas y minerales esenciales en su dieta.
En los países desarrollados como España, las deficiencias de micronutrientes también son frecuentes, con hasta un tercio de la población presentando niveles insuficientes de vitaminas y minerales.
¿Qué causan las deficiencias de minerales y vitaminas en la función cerebral?
Las deficiencias de minerales y vitaminas pueden tener un impacto significativo en la función cerebral. Por ejemplo, la deficiencia de vitamina B12, ácido fólico y hierro puede llevar a anemia, lo cual puede causar fatiga, debilidad y falta de concentración.
La deficiencia de vitamina D se ha relacionado con depresión, deterioro cognitivo y demencia. De manera similar, los niveles bajos de ácidos grasos omega-3, zinc y magnesio se han asociado con un mayor riesgo de depresión y ansiedad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la deficiencia de yodo es una de las deficiencias de micronutrientes más comunes en el mundo, afectando a más de 2 mil millones de personas.
El Consejo Internacional para el Control de los Trastornos por Deficiencia de Yodo (ICCIDD) estima que aproximadamente el 30% de la población mundial vive en áreas donde la deficiencia de yodo es un problema de salud pública, lo que lleva a una serie de problemas de salud, incluyendo bocio, retraso mental y deterioro de la función cognitiva.
- Vitaminas del grupo B: Las vitaminas del grupo B, incluyendo la vitamina B6, B12 y el ácido fólico, son esenciales para la salud cerebral. Desempeñan un papel clave en la síntesis de neurotransmisores, que son los mensajeros químicos que permiten la comunicación entre las neuronas en el cerebro.
Las deficiencias de vitaminas del grupo B se han relacionado con el deterioro cognitivo, la depresión y otros trastornos neurológicos.
- Vitamina D: La vitamina D es otro nutriente clave para la salud cerebral. Juega un papel fundamental en la regulación del sistema inmunológico y la reducción de la inflamación, ambos aspectos importantes para mantener una función cerebral saludable.
La deficiencia de vitamina D se ha relacionado con diversos trastornos neurológicos, incluyendo la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad de Parkinson.
- Magnesio: El magnesio es un mineral importante que es esencial para la salud cerebral. Ayuda a regular la función de los neurotransmisores, promueve un flujo sanguíneo saludable hacia el cerebro y reduce la inflamación.
La deficiencia de magnesio se ha relacionado con el deterioro cognitivo, la ansiedad y la depresión.
- Zinc: El zinc es un mineral traza importante para la función cerebral. Juega un papel clave en la regulación de los neurotransmisores y es esencial para la formación de nuevas células cerebrales.
La deficiencia de zinc se ha relacionado con el deterioro cognitivo, la depresión y otros trastornos neurológicos.
- Ácidos grasos omega-3: Los ácidos grasos omega-3, especialmente el EPA y el DHA, son esenciales para la salud cerebral. Ayudan a regular la función de los neurotransmisores, reducen la inflamación y promueven un flujo sanguíneo saludable hacia el cerebro.
La deficiencia de ácidos grasos omega-3 se ha relacionado con el deterioro cognitivo y la depresión.
- Yodo: El yodo es otro mineral crucial que desempeña un papel esencial en la función cerebral. El yodo es necesario para la producción de hormonas tiroideas, que regulan el metabolismo y apoyan el desarrollo cerebral.
La deficiencia de yodo es una causa significativa de deterioro cognitivo en todo el mundo, especialmente en países en desarrollo donde el suelo y las fuentes de agua carecen de yodo.
La idea de que puedes obtener todos tus nutrientes de los alimentos es válida en teoría, pero prácticamente imposible en la realidad. La degradación del suelo y del agua, las toxinas alimentarias y ambientales, la mala absorción, los pesticidas, el ejercicio y la falta de calorías pueden provocar deficiencias de nutrientes.
Existen evidencias de que consumir nutrientes a través de los alimentos es más beneficioso que los suplementos, por lo que debes centrarte primero en una dieta rica en nutrientes. Sin embargo, esto rara vez es suficiente en la actualidad.
Por lo tanto, complementar con vitaminas y minerales es un paso clave para mantener una salud y función cerebral óptima.
Suplementos nutricionales personalizados
Los suplementos personalizados están ganando popularidad a medida que las personas se vuelven más conscientes de la importancia de cuidar la salud de su cerebro. En Farmacia Echavarri tomamos nota de tus hábitos alimenticios, tus rutinas de ejercicio y tu estilo de vida y confeccionamos una dieta personalizada.
Un análisis y protocolo de suplementación personalizados son necesarios porque cada individuo tiene necesidades nutricionales únicas, y un enfoque de "talla única" puede no ser efectivo.
Los siguientes parámetros son esenciales para evaluar y desarrollar un plan de suplementación personalizado para una óptima salud cerebral:
- Serotonina: La serotonina es un neurotransmisor que regula el estado de ánimo, el apetito y el sueño. Una deficiencia de serotonina puede llevar a la depresión, la ansiedad y el insomnio, mientras que un exceso de serotonina puede provocar agitación y ansiedad.
- Dopamina: La dopamina es un neurotransmisor que está involucrado en la motivación, la recompensa y el placer. Una deficiencia de dopamina puede llevar a la depresión, la falta de motivación y la baja energía, mientras que un exceso de dopamina puede llevar a la adicción y el comportamiento impulsivo.
- Noradrenalina: La noradrenalina es un neurotransmisor que está involucrado en la respuesta de "lucha o huida". Una deficiencia de noradrenalina puede llevar a la fatiga, la depresión y la falta de concentración, mientras que un exceso de noradrenalina puede llevar a la ansiedad y el estrés.
- GABA: El GABA es un neurotransmisor que está involucrado en calmar el sistema nervioso. Una deficiencia de GABA puede llevar a la ansiedad, los ataques de pánico y el insomnio.
- Función hepática: El hígado desempeña un papel crucial en la desintoxicación del cuerpo y la regulación hormonal. Una mala función hepática puede llevar a la inflamación, los desequilibrios hormonales y el deterioro de la función cognitiva.
- Permeabilidad intestinal: La conexión entre el intestino y el cerebro es un aspecto crucial de la salud cerebral. Un desequilibrio de bacterias intestinales y un aumento de la permeabilidad intestinal pueden llevar a la inflamación, la niebla cerebral y la depresión.
- Cortisol: El cortisol es una hormona que está involucrada en la respuesta al estrés. Una deficiencia de cortisol puede llevar a la fatiga, mientras que un exceso de cortisol puede llevar a la ansiedad, el insomnio y el deterioro de la función cognitiva.
En conclusión, un análisis y protocolo de suplementación personalizados son necesarios para una óptima salud cerebral debido a que cada individuo tiene necesidades nutricionales únicas.
La evaluación de los niveles de neurotransmisores, la función hepática, la salud intestinal y los niveles de cortisol puede ayudar a identificar áreas que necesitan apoyo y desarrollar un plan de suplementación efectivo para lograr un funcionamiento cerebral óptimo.
Nuestros protocolos de consultoría personalizada también se adaptan a los objetivos individuales de nuestros clientes, ya sea que busquen abordar un problema o patología específica relacionada con el sistema nervioso o simplemente deseen optimizar el funcionamiento de su cerebro.
Comprendemos que cada persona tiene metas y necesidades únicas, y nuestro enfoque personalizado nos permite diseñar planes de suplementación y asesoramiento nutricional que se ajusten a esos objetivos.
Ya sea que estés lidiando con ansiedad, depresión, deterioro cognitivo relacionado con la edad, o simplemente desees mejorar tu rendimiento mental y promover tu salud cerebral, estamos comprometidos en ayudarte a alcanzar tus metas y mejorar tu bienestar cognitivo de manera integral.
